Cada vez más este tema llama la
atención, no solo en el ámbito académico sino también en la sociedad.
En agosto de 2014 se llevó a cabo
la III BRISPE: Brazilian Meeting on
Research Integrity, Science and Publicacion Ethics, cuyo objetivo
es el de promover la integridad científica y la conducta responsable por parte
de los investigadores en Brasil. Durante el evento se presentaron 10 ponencias relacionadas
con los problemas de las malas prácticas científicas, las políticas
instituciones y los esfuerzos que globalmente se están haciendo para reducir
dicho problema.
Aunque el evento estaba centrado
en las malas prácticas científicas en Brasil, participaron expertos
internacionales, provenientes de universidades y asociaciones con una alta
reputación como: Nick Steneck de la Universidad de Michigan, Rudiger Klein de
la Universidad de Beijing, Sergio Litewka de la Universidad de Miami, Mark
Frankel de la American Association for the Advancement of Science (AAAS),
Charlotte Haug del Committee on Publications Ethics (COPE),
etc.
Además se presentó el manual
“Código de Buenas Prácticas Científicas”,
con el objetivo es el facilitar directrices para que todo investigador conozca
como ejercer su profesión de la mejor manera, con el fin de que su contribución
al mundo científico conforme un avance en la ciencia y no una piedra en el camino.
En el manual se consolida el consenso entre la comunidad científica y sus
instituciones, los cuales deben auto-regularse y establecer sus propios códigos
de conducta basados en: la educación, prevención e investigación de las malas
prácticas y sanciones justas. Para ello, las instituciones deben promover
actividades educativas sobre los valores científicos y las malas prácticas, de
tal forma que el investigador sea conocer de ello.
Algunas malas prácticas
científicas pueden ser:
- Falsificación de datos
- Manipulación de resultado
- Plagio
- Publicaicones duplicadas (salami)
- Rechazar un artículo aunque es bueno por diferentes motivos:
- Tiene vinculación con el tema que el revisor está investigando.
- Apropiación de la idea por parte del revisor.
- El revisor llega a conocer quiénes son los autores y se deja llevar por los problemas personales que tiene con estos.
- Contratación de personal para la realización de la tesis de un tercero.
- No publicación de resultados negativos.
- Conflicto de intereses, se da cuando ciertos experimentos sólo soportan a los patrocinadores o financiadores.
- Manipulación de autores, esto puede darse de dos manera.
- Incluir a un tercero que no ha colaborado simplemente para ayudarle a ascender
- Incluir a un tercero porque posee una alta reputación en el área, y ayuda a que un artículo sea mejor valorado para su publicación.
- ¿Realmente hasta que punto el científico es consciente de la realización de una mala práctica científica? A veces la línea que separa el “bien” del “mal” es muy difusa.
- ¿Qué puede empujar a un científico a realizar una mala práctica? El principal factor que tal vez influye es el ambiente competitivo al que debe enfrentarse un científico. También el entorno, en este caso el grupo de investigación y compañeros, pueden influir a la hora de tomar una decisión de este tipo, es decir, la presión social.
- ¿Cuál es el horizonte de una mala práctica? ¿quién debería establecerlo, la institución científica, la universidad, el grupo de investigación, el propio científico, etc.?
- ¿Qué están haciendo las universidades de los países más avanzados en investigación para educar en los valores éticos a los nuevos científicos?
- ¿Qué se debe hacer si se descubre que científicos de reconocido prestigio han llevado a cabo malas prácticas en sus trabajos de investigación? ¿se le debe retirar el doctorado y premios conseguidos, debería ser apartado de su trabajo, etc.? En definitiva, ¿cuál sería su futuro?
En mi opinión, los códigos de conducta deberían ser aceptados por unanimidad en todos los países, ya que actualmente nos movemos en un mundo globalizado. Además , las universidades e instituciones científicas deberían impartir cursos y llevar a cabo actividades para concienciar y educar a los investigadores sobre las malas prácticas científicas.